Publicado: 13 de Agosto de 2016

Aparcar en las ciudades -sobre todo, en el propio centro- resulta en muchas ocasiones una misión casi imposible, incluso tratándose de zonas reguladas (de pago). Esta cruda realidad para los residentes y propietarios de vehículos sin aparcamiento privado tiene un efecto directo en el mercado de las plazas de garaje, que se convierten en auténticas joyas inmobiliarias, con precios que llegan a superar incluso los 150.000 euros.

En este sector, la contada oferta en el centro de las ciudades (donde poseer un garaje es un lujo) se convierte en un factor de presión que propulsa los precios hasta extremos casi impensables. Basta con sumergirse en los diferentes portales inmobiliarios para encontrar estas cifras desorbitadas.